El Ayuntamiento de Valencia aún no ha sacado a licitación pública la exhaustiva auditoría externa que debe determinar el coste total de la obra
- Peter Lim busca 120 millones de prestamistas, para alcanzar los más de 200 millones que costará la obra del Nuevo Mestalla.
- Para presentar el proyecto de ejecución, que incñuye presupuesto y calendario de obra, es imprescindible la auditoría aprobada por los concejales. En caso contrario, habría de nuevo prevaricación.
- Caixabank debería ejecutar las acciones de Lim como garantía de su deuda, al ni cumplir el club los ratios firmados en sus contratos con el Valencia CF.
- La venta del terciario firmada por Peter Lim ante notario es ilegal, debe convocar una junta de accionistas de la SAD. Y la venta no se puede ejecutar hasta que no se ejecute la obra del Nuevo Mestalla.
- Los plazos marcados para el 12 de octubre no se pueden cumplir, sin vulnerar los acuerdos aprobados en Comisión y en Pleno del Ayuntamiento.
Miguel Zorío, ex vicepresidente del Valencia CF, denuncia que “de nuevo hemos tenido razón y las mentiras de Peter Lim y de todos sus apoyos en la ciudad, han salido otra vez a la luz pública. El club no tiene el dinero suficiente para abordar la ejecución completa del Nuevo Mestalla, ahora busca desesperadamente 120 millones de euros más, a los que sumar a los 80 millones de CVC, y sin embargo, los políticos no se preocuparon de esto cuando en julio le aprobaron un pelotazo histórico a medida”.
Miguel Zorío denuncia que “Peter Lim no va a poner ni un euro más en el Valencia CF, y ha encargado a Goldman Sachs que busque en el mercado de prestamistas 120 millones de euros al precio que sea. No tiene voluntad de ser él quien termine el estadio. Sólo le interesa comenzar la obra y pegar otro pelotazo con la venta de sus acciones. El marrón nos lo dejará a los valencianistas con un club endeudado hasta las trancas y con un serio riesgo de quiebra. Como muestra incuestionable de esta situación de enfermo económico terminal que tiene el Valencia CF en estos momentos, sirva que Caixabank está incumpliendo el contrato que tiene con el club, y debería ejecutar las garantías que tiene el Valencia CF con el banco, ya que la SAD no es capaz de cumplir con los ratios de solvencia acordados. Entre las garantías que podría ejecutar están las propias acciones de Peter Lim, pignoradas en este caso”.
Para el portavoz de Marea Valencianista, “es imposible que sin incumplir la ley, Peter Lim cumpla con los plazos aprobados en el acuerdo que firmaron Maria José Catalá, Papi Robles y Borja Sanjuan, por el que se concedían beneficios urbanísticos superiores a 200 millones de euros, se permitía vender el terciario cuando esa venta es ilegal al no estar aprobada en junta de accionistas, y no se analizaba si la empresa de Peter Lim tenía capacidad financiera para abordar el proyecto al 100%.”.
“Los concejales que aprobaron en el pleno del Ayuntamiento el pelotazo de Peter Lim, deberían saber que la ley es muy clara: son responsables de sus actos con su patrimonio personal. Deben hacer cumplir a Lim lo aprobado: auditoría externa que marque el coste total de la obra, depósito del valor de la obra del polideportivo, exigir fianza sobre el coste total cuando existan indicios de no poder cumplir con la finalización del estadio (es más que evidente); presentar antes del 12 de octubre un proyecto de ejecución que incluye calendario vinculante de obra y presupuesto total (¿cómo lo van a determinar sin que se licite a concurso público una exhaustiva auditoría?), y por último, no podrá aportar como garantía de pago de la obra la venta del terciario, por ser ilegal y porque los propios concejales aprobaron que no se puede vender hasta que no se termine el Nuevo Mestalla” finaliza Miguel Zorío.